Porque sí, amigos no-roleros, con tochacos como esos, pero en tamaño humano, se topa uno para jugar al rol. Es algo complicado de explicar a los no-frikis aquello de tener que leerse todo eso para poder echar una partidita.
Ojo, si estás leyendo esto y lo de juegos de rol ni te suena, puedes aprovechar la frikimemez de la semana que viene, que ahí se explicará algo.
Una cosa está clara: Si nos aburre eso de leer instrucciones, ya sea para buscar los canales de la tele, jugar a un juego sencillito de mesa o ver cómo funciona el esterilizador de biberones, leernos el típico manual de rol no nos va a parecer nada divertido.
Pero a mí, la verdad, me encanta. Y eso que no tengo muchos, mi biblioteca es más bien modesta, que se ve cada una por Internet que es la envidia de cualquier friki rolero. Tengo unos cuantos manuales por ahí desperdigados, y los de la foto de más abajo no son ni la mitad de los que tengo, y los que tengo son menos de la mitad de los que querría tener, que es menos de la mitad de los que conozco ... sí, es verdad, lo de las mitades le quedaba mucho mejor a Bilbo.
No sé si la mesa de juego aguantará estos manuales |
En serio, planteáoslo, ¿no os resulta apetecible leeros un tochaco de casi 600 páginas en A4 para saber cómo jugar a un único juego?