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jueves, 7 de noviembre de 2024

De bestiarios y aventuras propias publicadas

Hace unos días me quejaba de la cantida de bestiarios que se necesitarían para poder dirigir la campaña de Pathfinder 2 «la corona del rey kóbold», ya que en esa pequeña campaña se referencian monstruos de tres bestiarios distintos (el uno, el dos y el tres; por error, también se referencia el seis, pero ya vimos que era un problema de traducción), sin mostrar sus estadísticas.

Y eso me recordó a los problemas (alias «tiempo que pierdo en pensar en chorradas») que yo me he buscado a la hora de publicar algunas aventuras (publicarlas en el blog, no lo entendáis como algo profesional sino como «subir una aventura al blog»).

Ese tema de tener que usar diferentes licencias y saber qué puedes publicar o qué no para ser estrictamente legal (o en la medida de lo posible) me dio algunos quebraderos de cabeza, sobre todo, por culpa de querer adaptar una misma aventura a distintos sistemas.

Aventuras propias publicadas y licencias

Siempre que he podido, he ido publicando algunas aventuras en el blog, sobre todo las que les he dirigido a mis hijos. No son muchas, pero al final, entre lo poco que jugamos y el tiempo que me lleva editar y publicar una aventura, no doy para más.

El caso es que el nivel de complejidad que le he querido asignar a las últimas publicaciones de estas aventuras (que son dos o tres, tampoco tantas), me ha hecho darme cuenta de un problema similar al que mencionaba con esa aventura de la corona del rey kóbold, y es querer evitar, en la medida de lo posible, poner referencias a bestiarios que a lo mejor el DJ no tiene.

Ojo, por complejidad no me refiero a que la aventura sea muy compleja (ya quisiese yo hacer aventuras complejas) o que la publicación sea muy profesional (ja, ja, ja, me parto, ni de lejos, son muy de andar por casa). Me refiero a que, ya que publico una aventura (que últimamente he dirigido a Pathfinder Salvaje o al sistema casero de Rol de Paseo), me gusta intentar adaptarla a varios sistemas.

Y es ahí donde me monto el lío yo solo con las licencias 😅. Que a lo mejor la solución sería no adaptar la aventura a distintos sistemas y punto pelota. 

En cualquier caso, el lío sería, por ejemplo, si he dirigido la aventura con Pathfinder Salvaje y he usado un monstruo X que aparece en el bestiario Salvaje de Golarión (que es el bestiario básico de Pathfinder Salvaje); pero al querer publicarla, me da por proponer que se puede jugar con Savage Worlds (al fin y al cabo, Pathfinder Salvaje no deja de ser una ambientación de Savage Worlds con alguna regla adicional y sería accesible a más jugadores), entonces ya no puedo indicar en la aventura que ese monstruo está «en la página 123 del bestiario salvaje de Golarión», pues el DJ que usa Savage Worlds no va a tener ese bestiario.

Que sí, que algunos monstruos del bestiario de Pathfinder Salvaje pueden estar en el manual de Savage Worlds y la referencia me va a valer (por ejemplo, los goblins), pero hay muchos otros que no lo están, y en esos casos ya no hay referencia que podrían consultar.

Y eso hablando solo de Savage Worlds, porque como luego también hago una versión adaptada a Mythras Imperativo, que no tiene bestiario y realmente tendrías que usar el Mythras o el Fantasía Clásica, pues ahí la lío más. ¿Está el bicho X de Pathfinder Salvaje en el manual básico de Mythras? ¿Y en el de Fantasía Clásica?

Vamos, que mi idea de solo exigir a quien la va a dirigir tener el material mínimo necesario hacía un poco de aguas. Si es para Pathfinder Salvaje, puedo "exigir" que tenga el bestiario salvaje de Golarion (como se podría exigir tener el Manual de Monstruos de D&D para dirigir una aventura de D&D), pero no si la preparo para Savage Worlds; o si la adapto a Mythras Imperativo y es un monstruo que aparece en Mythras, pues a ese DJ que quiere usar solo Mythras Imperativo ya no le vale. Cierto es que lo mismo tendría que obviar Mythras Imperativo en general para cualquier aventura de este pelo 😅, porque no me va a incluir ni sistema de magia ni monstruos.

Vaya manera de perder el tiempo que tengo en chorradas, ¿verdad?

¿Cómo desmadejar esta tontería mental? Pues la solución final fue tirar, siempre que ha sido posible, de licencias abiertas, usar las referencias más asequibles posibles o, en el peor de los casos, crear una nueva versión del monstruo para esa aventura. Ahí es donde fui consciente de todas esas aventuras que redefinen cosas genéricas como "soldados" cuando se podría usar una referencia al manual básico. Si ya está definido en la aventura, el DJ no tiene que estar tirando del bestiario y, si hay problemas de licencias, haces tu versión y punto.

Claro, eso me podría limitar a la hora de elegir los monstruos que uso al dirigir a mis hijos, si estoy pensando en publicar después dicha aventura, pero no es algo que me preocupa. Lo primero es su aventura y diversión y, si se puede publicar para que otro la use, pues guay. Si no, pues no se publica.

Opciones

En cualquier caso, al final las opciones que tomé para las aventuras anteriores fueron:
  1. Para Savage Worlds, intentar usar siempre una referencia al Savage Worlds y no directamente al bestiario salvaje de Golarión (que, además, releyendo más en profundidad la licencia fan de Savage Worlds, no tengo muy claro si se pueden usar referencias al Pathfinder Salvaje).
  2. Si el monstruo que he utilizado aparece en Pathfinder Salvaje y no está en Savage Worlds, tengo que crearme una versión propia diferente al del Pathfinder Salvaje (que básicamente consiste en crearlo pensando en cómo es ese monstruo en D&D sin mirar cómo está hecho en Pathfinder Salvaje).
  3. Para Mythras (en cualquiera de sus versiones, incluída la Imperative), aprovechar que existe el Classic Fantasy Imperative, con licencia ORC, que te permite reutilizar su contenido (con la correspondiente mención a la licencia). Darían más problemas los conjuros del Mythras básico, pero estas aventuras que he publicado se centran más en un universo tipo OSR (donde encaja el Fantasía Clásica).
  4. Igualmente, si es complicado usar la referencia de Mythras (porque el bestiario del Classic Fantasy Imperative es realmente limitado, sirve más como ejemplo para crear tus monstruos), de nuevo, hacer una versión propia siguiendo las reglas de creación de monstruos, sin mirar cómo está definido en Mythras.
  5. Para Magissa, más de lo mismo: ver si existe la versión en el manual para poder referenciarlo o hay que crearlo de cero. Aquí tampoco hay tanto problema, solo hay un manual, no varias versiones del mismo; si existe, guay, se referencia. Si no, pues a crearlo de cero. Además, crear aquí un monstruo es mucho más sencillo.
  6. Para Aventuras y Misterios, más fácil aún: no hay bestiario, hay que crearlo todo de cero, pero es extremadamente sencillo.
  7. Para D&D... perdón, para el juego de rol más antiguo de todos los tiempos... pues será tres cuartos de lo mismo. Cuando adapte alguna de las aventuras, tendré que proceder igual.
Estos pensamientos son una auténtica chorrada, lo sé, pero tienen su intríngulis. Y luego vendrá alguien que me dirá «pues créalos siempre de cero y punto», «pues publícala solo en un sistema y punto» o cualquier otra cosa acabada en «...y punto». Sería lo suyo, oye, ya os voy dando la razón por adelantado. Pero o me llevaría demasiado tiempo estar creando todas las estadísticas de todos los monstruos, o me sentiría un poco culpable por no dar alternativas a jugar esa aventura en otros sistemas.

Así que a pensar todas estas tontadas le dedico un tiempo que luego siempre digo que no tengo😅.

Total, luego nadie me da feedback de si las ha jugado o no, así que lo mismo he soltado toda esta chapa para algo que no se ha usado.


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