Tiempo que me llevó publicar la última aventura de rol

Para la última aventura que he escrito y publicado en el blog, la torre de Tolomeo, me había propuesto hacer un experimento personal, y era ver cuánto tiempo (aproximado) me lleva publicar una aventura para que la puedan dirigir y disfrutar (o sufrir, según se mire) otras personas. Siempre me pareció que me llevaba bastante tiempo pero nunca lo había calculado, y tenía curiosidad.

Ojo, a tener en cuenta, que cuando digo publicar, no lo digo en plan profesional ni nada, todo lo contrario, es en plan amateur. Amateurismo nivel muy amateur. Llamo publicar simplemente a pasar a limpio una aventura que ya había dirigido (con anotaciones en sucio) y publicarla en el blog (y gratuita, recordad, gratuita) para disfrute ajeno.

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Aún siendo una aventura amateur, hay que tener en cuenta que la he escrito pensando que cualquiera (nuevo o con experiencia) la pueda jugar, así que había que detallar más que esa que te has escrito en sucio para ti mismo: alguien nuevo podría necesitar gran parte del texto escrito como guía, mientras que alguien con experiencia a lo mejor pasará de muchos de los bloques con comentarios, tomando más la idea de la aventura como referencia.

Todavía me quedan cosas por hacer, ya que quiero crear varias guías de conversión (Mythras, Aventuras y Misterios y, quizá, D&D) y a lo mejor hacer algún mapa más, ya saldrán correcciones según haga otras guías de conversión o detecte erratas o párrafos poco claros; pero, al menos, ya está disponible y cualquier interesado podría adaptarlo, más o menos al vuelo, para sus propias partidas.

Para tener ligeramente detallado lo que me ha llevado hacerlo, lo fui publicando en Twitter (posteriormente llamado X), en este hilo. La intención de esos tuits era tenerlo yo mismo como referencia para calcular luego, por encima, el tiempo que me había llevado acabarlo y cómo fue evolucionando.

Como siempre me suele pasar, el primer día el avance fue muy lento (si hablamos en palabras por días), ya que consistía más en darle la estructura al documento: reutilizar una aventura anterior para reutilizar formatos y bloques de texto; borrar contenido que no procede; determinar apartados y escenas; recopilar ideas; pensar en la imagen de portada...

A partir de ahí, cada día que pude ponerme a escribir, intenté dedicarle algo así como una hora (media arriba, media abajo), aunque es verdad que nunca me concentro del todo (lo alterno con ver la tele o dar cabezazos en el sofá por el sueño que tengo, ya que siempre escribo por la noche, cuando está la familia ya dormida). De media, de 600 a 1100 palabras por día. Hay que incluir un par de escenas que no estaban preparadas durante la partida y surgieron de la misma, lo que también llevó un tiempo adicional el tener que transcribirlas

Una vez acabado lo gordo (muchas palabras, una detrás de otra), tocaba revisar el documento, hacer al menos una guía de conversión (para Savage Worlds) y añadir las estadísticas de los PNJs. La de errores que pude corregir (palabras muy mal escritas, faltas de ortografía y frases inconexas) porque se notaba que di algún cabezazo y había escrito alguna tontería medio dormido 😁.

En total, han sido dos documentos: la aventura, con 14 páginas más la portada y 7758 palabras; la guía de conversión para Savage Worlds, con 1874 palabras, 5 páginas y el tiempo dedicado a investigar un poco más sobre la licencia Fan; y la actualización del blog (la entrada del blog, actualizar la página de las aventuras y recursos roleros, y programar las entradas en Twitter y Mastodon (coincidiendo con el Día del Orgullo Friki). De nuevo mencionar que no incluye el tiempo que le di vueltas a la aventura en la cabeza o que me llevó las anotaciones en sucio para jugarlas con mis hijos. Solo pasar a limpio la aventura.

¿Y cuánto tiempo me ha llevado subir esta mierdecilla de aventura? Pues al final, a ojo, unas 15-17h. Dos jornadas completas de horario laboral. Unos dieciséis días (no continuos) dedicándole algo así como una hora. Sin ni siquiera haber hecho unos mapas bien hechos, sino algo a mano que luego he escaneado y ya está (y mira que mi máster y amigo Igor se ofreció a hacérmelos, pero esto era algo así como personal, aunque fuese cutre). Todo esto, para ni siquiera saber si a alguien le interesará, todo sea dicho, que posiblemente se convierta en tiempo perdido.

Esta claro que subir la aventura con solo anotaciones y guías, sin ningún tipo de formato, para que el que la coja después tenga que añadir siempre algo de su parte, puede llevar... no sé... ¿un par de horas? Pero si quieres dejar todo más o menos cerrado para que a quien la lea no le falte nada básico, requiere bastante dedicación.

Así que ya no digamos lo que llevará publicar una aventura de forma profesional, nada tan cutre como esta, con su formato bonito, sus portadas llamativas, mapas e imágenes bien hechas, maquetada para ser impresa, con la partida testeada en varias mesas. Dioses míos, si publicar mi aventurilla de pacotilla ha llevado dos jornadas de trabajo, lo que debe llevar hacerlo todo bien de verdad. Chapeau por los profesionales del rol.